Muchos estarán en desacuerdo con mi opinión, pero el tenis actual me deja un sabor amargo y muchos interrogantes para los que no encuentro respuesta.
Siempre supimos que las mujeres jugaban menos que los hombres, a pesar de esto tuvimos inolvidables y grandes estrellas que nos deleitaban como Margaret Smith de Court, Billy Jean King, Martina Navratilova, Cris Evert, Steffi Graf, Mónica Séles, Arantxa Sánchez Vicario, Gabriela Sabatini y otras que no nombro por razones de espacio. Pero en la actualidad el tenis femenino se ha convertido en una sucesión de jugadoras que aparecen y desaparecen como una estrella fugaz o un rayo de luz, hasta son capaces de ganar un Grand Slam y al poco tiempo no ganar más de dos games en el mismo Major. En muchas ocasiones las lesiones producto del entrenamiento indebido a edades en las cuales no se debe forzar el físico de las niñas o niños hace que a los veinte años estos niños padezcan lesiones crónicas impidiendo desplegar su juego. En otras la psiquis y mente del tenista ha sido tan maltratada a edades que debieran estar jugando con las muñecas que cuando llegan a la adolescencia se "les quemó la cabeza" como dicen los jóvenes hoy en día. Hay tenistas cuya cabeza está quemada y no pueden resistir entrar a jugar un partido de un torneo ATP O WTA y esto no es privativo del tenis femenino, en el masculino tenemos ejemplos y en la Argentina varios, Guillermo Coria, Gastón Gaudio, en mujeres Ana Ivanovic, María Sharapova, Anna Kournikova etc.
¿Qué ocurrió con estos jugadores que llegaron al top ten y luego desaparecieron tan abruptamente y nunca pudieron volver a su nivel?
Entrenadores que no están capacitados que ven en el jugador una rentabilidad futura y la posibilidad de alcanzar una fama como tales sumado a esto un entorno familiar que sueña con visitar los palcos de los grandes torneos, beber champagne y sacarse la foto en la Torre Eiffel presionan a chicos que no están preparados para enfrentar lo que les espera cuando alcancen el top del tenis profesional. Creo que las distintas federaciones debieran organizar programas idóneos que eduquen a los jugadores para asimilar lo que vivirán cuando lleguen a ser grandes jugadores y sepan cómo desenvolverse en el circuito y evitar ser presas de las presiones. Tomemos el ejemplo de quién sale segundo en un Grand Slam es mirado hoy como un "PECHO FRÍO" o un "PERDEDOR". Salir subcampeón en la actualidad es una deshonra, los perdedores lloran, los ganadores también porque es tan grande la presión que luego del match final ambos contendientes lloran, uno porque perdió y el otro porque está exhausto de la presión que soportó durante las dos semanas previas. Esto no era así décadas atrás, ahora el circuito con una cantidad de torneos abrumadora, hay dos o tres ATP por semana más los Challengers y Futures, en WTA no es así pero en la ATP este coctel ha provocado un presente tan incierto en el tenis masculino con lesiones al por mayor y "Cabezas quemadas".
Sea por una causa o por otra el tenis no pasa por un momento positivo. Sí veo como algo positivo el arribo a la final de Francesca Schiavonne y Samantha Stosur de veintinueve y veintiocho años ambas lo que de alguna manera desmitifica este dogma creado por vaya a saber quién de que si las mujeres a los quince años no están jugando WTA y entre las doscientas primeras no tendrán posibilidad alguna de sobresalir como tenistas, en esto también creo que muchos se equivocan y no hacen más que producir jugadoras de corta duración en vez de formarlas para una larga carrera y prepararlas para que a otra edad entren en el grupo de las mejores, pero desgraciadamente se sostiene que si a los quince no juega top doscientos en WTA no habrá posibilidad alguna para ellas, esto precisamente es lo que han refutado en Roland Garros, la simpática campeona Francesca Schiavone y la correcta Samantha Stosur, y entonces se puede llegar al top a otras edades y no solo a la que las chicas están soñando con su fiesta de quince años.
En cuanto a los hombres vimos que jugadores que ya han dado o llegado a su máximo nivel como Juan Carlos Ferrero ex número 1 y Campeón de Roland Garros o David Ferrer, ex top five han tomado protagonismo nuevamente, incluso el argentino de treinta años Juan Chela ha ganado un ATP este año. Estos casos son distintos a los que cité de las mujeres, porque es lógico que un jugador que ya ganó Grand Slam o estuvo en los primeros planos, cuando llega a los treinta o veintiocho años comience a declinar su nivel, salvo excepciones como las de Andre Agassi u otras. El tenis masculino nos mostró un Roland Garros con un Roger Federer en un nivel muy pobre, sin piernas, sin drive, como encaprichado en no querer retroceder ni desplazarse hacia los costados y los resultados fueron negativos en la gira de polvo de ladrillo salvo en el Master 1000 de Madrid que llegó a la final. Rafael Nadal mostró su estirpe en la tierra colorada y nuevamente ganó todo, pero no tuvo rivales, igualmente el comienzo del año no había sido feliz para él, veremos si el nivel de la tierra batida se extiende ahora a las otras superficies. Pareciera que sus lesiones crónicas y casi incurables como se decía meses atrás, hasta anunciaron que sus rodillas era las de un hombre treintinueve años, desaparecieron misteriosamente y son de un chico de veintitres años con mucha potencia, casi inigualable.
Detrás de Rafa y Roger no hay mucho, el escocés Andy Murray parece haber bajado de nivel y a pesar de que muchos lo nombraban como el Nastase moderno y que se iba a cansar de ganar Grand Slam por ahora este augurio parece lejano. Novak Djokovic cambió su servicio y no se encuentra con su juego, Juan Martín del Potro, operado de la muñeca izquierda, es una incógnita pero lo aguardamos con ansiedad esperando que recupere el gran nivel que mostró en el Abierto de Estados Unidos el año pasado.
Es de esperar que las figuras ya consolidadas terminen de despegar como el croata Marin Cilic y aparezcan otras nuevas que hagan volver a ambos circuitos el esplendor de otrora.
Alejandro Olmedo Zumarán.
3 comentarios:
Linda nota, Negro. Mantenenos informados.
Abrazo. JM
azu491902Gracias Tordo. Un abrazo.
Alejandro.
Buena nota Ale!
Solo te dejo una opinión en algo personal que no hace al verdadero contenido de la nota: no creo que Arantxa haya sido una estrella. Creo que su tenis no deleitó a nadie. Ni siquiera me parece que haya sido portadora de un tenis elogiable.
De todos modos, no tiene nada que ver con tu nota que es excelente! Solo creo que, a mi entender, su tenis no merece estar en esa vitrina vip, aunque haya llegado a lo más alto.
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