"No se pongan la mano en el corazón, les pido que se la pongan en el bolsillo" dijo la Presidente.
Señora Presidente no es positivo creerse superior y el dueño de la razón. En primer lugar porque no es de gente con honor, digna y educada. En segundo porque el día que el poder se acaba y se choca con la realidad el golpe será similar a toparse contra un Glaciar como el Perito Moreno.
El país está en ruinas, seguimos avanzando en el ranquin de corrupción, en el que ya ocupamos el puesto 106, los pobres no son la friolera suma de doce millones como anuncian orgullosamente sino muchos millones más, los niños muertos por desnutrición infantil son cinco por día, las cifras de empleo cuentan entre sus miembros a los desposeídos que reciben sumas mensuales indignas y míseras por no realizar trabajo alguno, la inseguridad, el narcotráfico y la impunidad de los asesinos nunca ha llegado a estos niveles, entonces Señora no se deben expresar frases irrepetibles como la que usted ha pronunciado.
Dicen que la realidad es la única verdad y las cifras y frases que anuncia no reflejan la realidad. Mi bolsillo no está vacío pero estoy llegando al fondo, no quiero imaginar como estará el de los dieciocho millones que no tienen para comer, educarse, curarse y vivir dignamente.
Y toda esta gente tiene corazón seguramente más grande que el suyo y el mío pero su bolsillo está vacío hace décadas.
Alejandro Olmedo Zumarán.
Señora Presidente no es positivo creerse superior y el dueño de la razón. En primer lugar porque no es de gente con honor, digna y educada. En segundo porque el día que el poder se acaba y se choca con la realidad el golpe será similar a toparse contra un Glaciar como el Perito Moreno.
El país está en ruinas, seguimos avanzando en el ranquin de corrupción, en el que ya ocupamos el puesto 106, los pobres no son la friolera suma de doce millones como anuncian orgullosamente sino muchos millones más, los niños muertos por desnutrición infantil son cinco por día, las cifras de empleo cuentan entre sus miembros a los desposeídos que reciben sumas mensuales indignas y míseras por no realizar trabajo alguno, la inseguridad, el narcotráfico y la impunidad de los asesinos nunca ha llegado a estos niveles, entonces Señora no se deben expresar frases irrepetibles como la que usted ha pronunciado.
Dicen que la realidad es la única verdad y las cifras y frases que anuncia no reflejan la realidad. Mi bolsillo no está vacío pero estoy llegando al fondo, no quiero imaginar como estará el de los dieciocho millones que no tienen para comer, educarse, curarse y vivir dignamente.
Y toda esta gente tiene corazón seguramente más grande que el suyo y el mío pero su bolsillo está vacío hace décadas.
Alejandro Olmedo Zumarán.
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